Si estás buscando cuáles son las verduras astringentes imagino que tienes problemas estomacales o diarrea, de manera que vamos a ir directamente al grano.
La calabaza, la zanahoria y la patata son las verduras astringentes
Dentro de todo el grupo de verduras, las que se recomiendan para la diarrea y los problemas estomacales son la patata, la calabaza y la zanahoria, siempre cocidas.
Las dos primeras no se comen crudas, pero la zanahoria sí que se suele comer sin cocinar, por lo que hay que advertir que para que sea astringente tiene que estar bien cocida.
Lo ideal es comerlas en forma de puré, de manera que el estómago no tenga que trabajar demasiado cuando está en problemas.
Estas verduras son también astringentes en los niños, pero aquí es mejor que acudamos al médico, sobre todo si el niño es de corta edad.
En cuanto a los bebés, ni se os ocurra dar un puré de estas verduras sin consultarlo con el pediatra, ya que en niños tan pequeños hay que tener un cuidado especial con lo que les damos, sobre todo si están enfermos.
Qué verduras no son astringentes
Al igual que las verduras que hemos visto antes son recomendables para los problemas de estómago, ya que además de ser fácilmente digeribles tienen ciertas propiedades cicatrizantes e incluso antiinflamatorios, hay verduras a las que no tenemos que acercanos cuando tenemos diarrea o dolor de estómago.
Estas verduras son las típicas que nos producen gases, sobre todo si las consumimos por la noche. Estamos hablando del repollo, el brócoli y cualquier verdura en ensalada que pensemos comer en crudo, algo que no le viene nada bien a nuestro cuerpo en esta situación.
Verduras astringentes para perros
Al al igual que pasa con nosotros, los humanos, los perros también sufren problemas de estómago y diarreas, quizá con más frecuencia que nosotros debido a que no son muy selectivos con la comida que ingieren.
De esta manera, si nuestro perro tiene diarrea podemos probar a darle una dieta astringente con verduras. Éstas son las mismas que para los humanos, pero lo cierto es que un perro no se va a comer un puré de zanahoria, calabaza y patatas, menos si está enfermo.
Por eso, estas verduras las tenemos que acompañar con carne cocida, preferiblemente de pollo, a la que después de cocer le quitaremos todos los huesos.